Sin duda habrás oído hablar de Pompeya, de la tragedia que la sepultó bajo la lava del Vesubio o habrás visto fotos de los moldes de las personas que quedaron sepultadas bajo las cenizas (sí, son moldes que se han sacado de las cenizas solidificadas, no personas calcificadas).
Podemos asegurar que es una visita imprescindible en Italia, de esos lugares que tienes que ver al menos una vez en la vida. Y es que tanto la historia de lo que allí pasó, como la visita a los restos romanos bien merecen una excursión de un día desde Nápoles o una parada de camino a la Costa Amalfitana.
Hoy en día se trata de uno de los yacimientos arqueológicos más famosos del mundo. Cerca de aquí se encuentra Erculano, visita también imprescindible.
Un poco de historia:
Pompeya era una próspera ciudad italiana, como podrás observar con las inmensas dimensiones de la ciudad (44 hectáreas). Pero esto no la dejaría libre del capricho de la naturaleza, y el 24 de agosto del 79 d.C. el Vesubio, un volcán cercano (del cual desconocían que era un volcán) entró en erupción llevándose por delante miles de vidas y todo lo que pilló a su paso. Algunos intentaron refugiarse y otros huyeron, pero la ciudad quedó arrasada y sepultada por 5 metros de ceniza y lava.
De este modo Pompeya desapareció y cayó en el olvido. Durante mucho tiempo hablaban de la «ciudad perdida» y a veces encontraban restos antiguos. Pero no fue hasta 1.860 cuando Giuseppe Fioreli se toma en serio la investigación y empiezan las primeras excavaciones hasta lo que conocemos hoy en día.
Gran cantidad de datos que nos han llegado del año 79 d.C han sido gracias a los escritos de Plinio el joven, que se encontraba en la cercana ciudad de Misena.
En la actualidad hay desenterrados dos tercios del total de la ciudad. Se han encontrado 2.000 cuerpos de una población de 20.000 habitantes.
En el siguiente enlace podrás descargar los mapas y guías oficiales de Pompeya.
Curiosidad:
¿Sabías que los romanos ya contaban con pasos de peatones? Como puedes ver en la foto tenían piedras elevadas para que los peatones pudieran cruzar las calles sin llenarse de barro y salvar el desnivel de las calles.
Información práctica:
Dónde se encuentra:
Pompeya se encuentra en Italia, a unos 30 km al sur de Nápoles.
Cómo llegar:
Coche:
Llegar en coche es muy fácil, si nos atrevemos a conducir en Italia, ya que cuanto más al sur más locura es ponerse al volante. Fue nuestro medio para llegar.
Desde Nápoles hay que tomar la carretera A3, preferiblemente con peajes, y tomar la salida de Pompeya que indican las señales. Se tarda una media hora sin tráfico.
En la zona de Pompeya hay varias entradas y varios aparcamientos de pago. El lugar no tiene aparcamiento oficial como tal, sino que son aparcamientos privados cada uno con un precio diferente.
Cuando indicábamos tomar el peaje es para evitar la zona de Torre del Greco, que es bastante peligrosa. Por lo que nos dijeron hay hasta un dicho popular haciendo alusión a la inseguridad de la zona.
Transporte público:
Sin duda si no tenemos coche la mejor opción es el tren, ya que nos deja prácticamente en la puerta del yacimiento de Pompeya. La parada se llama Pompei Scavi Villa Dei Misteri, tarda unos 30 minutos desde la estación central de Nápoles y es el tren MET que va a Salerno.
Curiosidad:
En muchas de las casas había carteles con dibujos que indicaban lo que allí vendían o a lo que se dedicaban. Se pueden observar muchos dibujos que nos anuncia que aquel local era un prostíbulo, como el siguiente:
Entradas:
Se pueden comprar a la llegada (recomendable si es temporada baja) y desde allí coges un mapa en el centro de visitantes; o por el contrario, puedes compraras online en http://pompeiisites.org que te redirige al punto de venta oficial. Esta opción es la recomendada si vas en temporada alta, aunque cobran una comisión por la venta online. Cuidado porque hay muchas páginas que simulan ser la oficial pero no lo son y nos podemos encontrar con problemas para luego validar las entradas.
Leer más: Pompeya, una ciudad bajo la lava.En 2023 el precio de entrar a Pompeya es de 18€ y de la entrada reducida 2€. Consultar precios y horarios actualizados en su web.
¿Cuánto tiempo necesito?:
Pompeya ocupa 44 hectáreas. Ellos mismos te recomiendan que al menos estés 2-3 horas. Nosotros estuvimos 4 horas y media (sin audio guía ni guía) pero hubiéramos estado 5-6 horas, ya que se nos quedaron cosas sin ver. Esto es muy personal, pero mínimo 2 horas.
¿Dónde comer?
Sinceramente, en este caso la mejor opción es llevar un bocadillo y botella de agua. En la entrada principal había cafetería, y también vimos otra cafetería en la vía principal de Pompeya.
A las afueras, de camino a la estación de tren había numerosos restaurantes, pero eran los típicos para «guiris» que te cobran una salvajada y la calidad deja mucho que desear (esto lo opino sin haberlos probado, a lo mejor había alguno decente).
¿Dónde dormir?
Por la zona hay un montón de hoteles y de guest house para todo tipo de gustos y bolsillos.
En nuestro caso retrocedimos un poco, ya que teníamos intención de subir al Vesubio a la mañana siguiente (spoiler: no pudimos, llegó un temporal y ni los niños fueron al colegio).
B&B Incanto fue nuestra elección. Lugar perfecto con unas vistas increíbles a los pies del Vesubio:
https://www.booking.com/hotel/it/b-amp-b-incanto-ercolano.es.html?aid=1250789&no_rooms=1&group_adults=2: Pompeya, una ciudad bajo la lava.Si finalmente os animáis y visitáis esta increíble ciudad, preparad calzado cómodo y crema solar para los días verano.
Esperamos que os haya gustado y los disfrutéis tanto como nosotros 🙂
AA y JC